25.4.11

Canción del río (Weldon Kees)

En patíbulo público para el ojo privado
junto al río neutral donde estaban los chicos
me ahorcaron por la gente, para mirar el cielo.

Cuando ahí me colgaron, ondeé como bandera
junto al río azul donde jugaban esos chicos:
fue parte del atraso cultural mi sonrisa.

Tres mártires nombré. Mi madre vino a verme
a aquel río gris, donde los chicos me miraban:
“Hijo mío, le has hecho honor al apellido”.

Yo me puse contento. Luego pasó un desfile
por el río oscuro donde saludaban los chicos,
y al ver los uniformes me estremecí y lloré.

Me traté de bajar. Lo que había aprendido
junto al río sin sol donde esos chicos gritaban
era sólo dolor. Me ardían las ataduras.

No podía moverme. ¿Me habían arrojado
junto al río en sombras donde los chicos fracasaban
o por mis propios medios había llegado ahí?

Y cuando me bajaron unas bandas tocaban
junto al río sucio donde lloriqueaban los chicos,
y vestido de negro un hombre dio un discurso.

Dijo que yo era un héroe. Pero no me importó.
El río manaba sangre y los chicos murieron.
Yo quería morir, pero ahí me dejaron.